Por Yelaine Martínez Herrera
Las artes escénicas están de fiesta por estos días en Las Tunas. Regresó la Jornada Villanueva, que cada año en toda Cuba honra a los avasallados en el teatro capitalino de igual nombre, allá por el año 1869. Hoy nos parece escuchar nuevamente al personaje de la obra Perro huevero, aunque le quemen el hocico, cuando exclamó: «¡Viva la tierra que produce la caña!», despertando en el público el inminente grito: “¡Viva Cuba libre!”. Exclamación que despertó la rabia de los españoles y respondieron con masacre.
Por eso, no podía ser otro el comienzo de esta cita en el Balcón de Oriente que recordar ese momento, ante la presencia de teatristas, directivos y otros amantes del arte de las tablas. La apertura ocurrió en la noche de este 18 de enero, precisamente en la Plaza Martiana, lugar que honra a quien –años después de los sangrientos hechos- expresara en sus Versos Sencillos: “El enemigo brutal/ nos pone fuego a la casa. /El sable la calle arrasa, / a la luna tropical…”.
Allí se reconoció, además, la labor de Emelia González Durañona, una de las primeras actrices del guiñol Los Zahoríes, quien ha dejado su huella en diferentes puestas y ha contribuido a la formación de nuevas generaciones de actores. Ella, emocionada, dijo:
Qué puedo haber hecho yo si no fuera por ustedes, que me han amado y apoyado. No he hecho otra cosa que trabajar con amor, pasión y sacrificio, para hacer algo por el bien de los demás.
El coro de la escuela profesional de arte El Cucalambé, el solista Jorge Orlando, los actores Frank Herrera y Lisandra Rivero, entre otros creadores, formaron parte del elenco que compartió su talento durante la inauguración. Posteriormente, la sala Blanca Becerra (sede del grupo Total Teatro) acogió la presentación de la obra La Avaricia, con la dirección general de Elizabeth Borrero y la dirección artística de Juan Manuel Maestre.
Este último, junto Adelaida Villavicencio, protagonizaron la puesta, regalando a los espectadores momentos para recordar y reflexionar. Así lo resumió Maestre: “Alucinante, existencial, la trama busca una introspección al universo del hombre, desterrado de la sociedad, a punto de ser un extranjero en ella”.
“Venimos a olvidar” es una de las tantas frases viscerales que distinguen al diálogo entre los personajes, Bruta y Nadie, quienes -“desgarrados, atrapados en las trampas de la nostalgia, de lo que ya no será- se sumergen en la universidad de la calle”.
Para todas las noches del evento, hasta el 22 de enero, se prevén actuaciones en la “Blanca Becerra”. La jornada cuenta, además, con espacios teóricos, talleres y otras iniciativas, dedicadas aquí –además del 155 aniversario de los sucesos del Villanueva- a Emelia González Durañona.
En el programa se inserta el grupo Teatro sobre el Camino, de Villa Clara, quien compartirá la obra Fronteras S.A, mientras el actor y diseñador camagüeyano Mauricio Maynardo impartirá un taller de sombras chinescas en la sala Raúl Gómez García.
Asimismo, la jornada propicia un acercamiento a la vida y obra de Emelia Durañona, desde la mirada del especialista en Artes Escénicas Alberto Carlos Estrada Segura. Por su parte, el guiñol Los Zahoríes presentará Un bien con un mal se paga, entre otras invitaciones. Al cierre de la jornada, el Día del Teatro Cubano, se entregarán reconocimientos y distinciones.
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