Por Magda Iris Chirolde López
Con el propósito de mostrar las raíces culturales españolas presentes en la cultura cubana, así como la vida cultural y las costumbres de las regiones y comunidades autónomas de España, quedó inaugurado el festival La Huella de España, que tendrá lugar hasta el 14 de abril, en La Habana.
En su XXVIII edición, está dedicado por primera vez al País Vasco, y contará con un programa abarcador que incluirá galas variadas de aristas y agrupaciones cubanas y españolas, sobre todo vascas, del Ballet Nacional de Cuba, el Ballet Español de Cuba, la Compañía Irene Rodríguez, el Coro Entrevoces, las interpretaciones de Ivette Cepeda, Luna Manzanares, Corina Mestre, Adrián Berazaín, entre otros artistas, según refirió Fernando Rojas, Vice Ministro de Cultura, en la gala de inauguración.
A partir del año 1998 el festival fue dedicado a diferentes comunidades autónomas como Valencia, Islas Canarias y Andalucía. En esta ocasión coincide un momento muy particular de estrechamiento de los lazos entre las asociaciones regionales españolas y los organismos de la nación caribeña.
“Esta es una historia de 500 años de interacción, comunicación, aceptación, victorias y derrotas, pero siempre de una reconciliación entre los dos países. Tan importante es la huella de España en Cuba, como la hulla de Cuba en España”, dijo Juan Fernández Trigo, embajador de España en Cuba, en las palabras de apertura.
“Para mí es un símbolo de lo que es o debería de ser el tratamiento de los inmigrantes; hoy en día que tanto hablamos de cómo se acoge a los extranjeros que vienen de otros lados. Creo que el evento representa eso, un respeto por la integración sobre el reconocimiento de las culturas diferentes.
“Es un honor que este festival siga reconociendo la diversidad española y este año, el hecho de que se dedique al País Vasco, una región que encontró finalmente la paz después de mucho sufrimiento, me parece que es todo un símbolo de lo que supone esa necesidad de reconocer la diversidad y de aceptarnos tal como somos”, expresó el embajador.
De acuerdo con Renato García, presidente de la Asociación Vasco Navarra en Cuba, en 60 años se fueron perdiendo las costumbres de dicha nación y están encargados de rescatarlas y enriquecerlas. “Este es un espacio oportuno para dar a conocer que la cultura vasca es sui géneris, pues no se parece en nada a las demás regiones españolas”, afirmó.
Durante los próximos días se podrá admirar la icurriña, bandera vasca muy parecida a la inglesa, la chapela (una boina), el laurd, una especie de amuleto que utilizaban los vascos para los malos ojos, la maldad, así como los pasos de la danza vasca presentes en el ballet clásico.
En portada / Inauguración del XVIII Festival La Huella de España / Foto Buby Bode