Jorge Alberto Piñero (JAPE)
Poco a poco, y gracias particularmente a la voz pópuli que se riega como la pólvora, ya el Aquelarre es noticia y muchos disfrutan de sus propuestas. Es cierto que quisiéramos que la avalancha de público fuera total, como en otras ediciones, pero ya lo dije: eran otros tiempos. Lo cierto es que el Festival de los humoristas cubanos de 2022 ya está haciendo historia y ha demostrado que el género de la risa, muchas veces vilipendiado, sigue contando con numeroso y buenos creadores en la Isla.
Si alguien tuviera dudas puede acercarse a los espacios ya mencionados, particularmente en el Café Teatro Bertolt Brecht, donde radica el “cuartel general” de los bisoños que proponen su Stand up comedy como novedosa forma de hacer humor en las tablas, algo muy cercano a lo que ya conocemos como unipersonal, pero con otra estética y proyección. Los reemplazables, como han dado a llamar a su espectáculo, que dirige y conduce un connotado del gremio nombrado Michel Pentón, nos trae propuestas diversas defendidas por muchachas y muchachos que comienzan a andar por los difíciles caminos de la actuación y la comedia, con verdadera frescura y valor. Se van adueñando de un público fiel, ávido de las rupturas y esquemas ya trillados en el humor cubano, pero sin negar su esencia. Sindy, Yanetza, Claudia, Julia, Krístofer, Explicandy, Phillips, Capitán 10, son los nombres o motes escogidos por estos noveles que agradecemos en la escena y que nos hacen soñar en grande.
No ha faltado en Aquelarre la presencia de los grupos que han sentado cátedra como es el ejemplo de La Leña del humor de Santa Clara, Etcétera, Caricare, Pagola la Paga, Punto y coma, Los hepáticos y de solistas al estilo de Kike Quiñones, El Habanero (Julio César Rodríguez), El Cabo pantera (Ángel Rámiz), Jorge Bacallao, Otto Ortiz, Rigoberto Ferrera, Mariconchi (Orlando Manrufo), El Flacomímico… y sé que siempre se quedará alguien sin mencionar, pero que bueno que aún son muchos los que apuestan por hacernos reír y reflexionar.
Hablando de nombres e individualidades, quiero destacar y felicitar al actor Carlos Gonzalvo, quien fuera homenajeado en la sala Tito Junco del Bertolt Brecht, como parte de las actividades del Aquelarre, por arribar a 35 años de vida artística. El conocido y popular Mente’pollo, suma muchos años de entrega al arte y al público, en disímiles expresiones de la actuación, con encomiables resultados. Para él, la enhorabuena y hablaremos más de este genuino cubano en próximos artículos, porque así lo merece.
Aquelarre continúa deleitando al pueblo que reside en la capital hasta cerrar sus cortinas en este domingo 18 de diciembre, con el espectáculo clausura que tendrá lugar en la sala Covarrubias del Teatro Nacional. Un excelente elenco nuevamente unirá su labor e impronta para hacernos reír y decir adiós momentáneamente porque sin dudas, ya rompimos la inercia y la fiesta continúa.
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