Por Diosmel Galano Oliver
Después de un camino de representaciones, sobre todo en el occidente de la Isla, llegó hasta la Jornada Ciudad Teatral la obra FK. Fantasía sobre Frida Kahlo, propuesta que, en el mes que se toma para arreciar la lucha por los derechos de las mujeres permite a los espectadores conocer de esos demonios que acompañan a la reconocida artista mexicana aún después de muerta.
En la Sala La Edad de Oro se dispuso el montaje, tan fácil resultó perderse en la cultura de la nación azteca para transitar por ese mundo de ensoñaciones, comprender mejor las creencias que veneran hasta más allá de la vida y repasar un contexto social y político convulso, tanto como las tribulaciones que signaron la presencia sobre la tierra de Kahlo.
Mucha investigación se esconde detrás de la puesta que lidera Reinaldo León y Yuliet Montes, quien asume, además, el compromiso de encarnar a la creadora y a su némesis, surcada por las laceraciones físicas y espirituales, pero con la capacidad de saber llevar al lienzo, de ser consecuente con sus ideas, de evolucionar en lo personal y lo creativo para dejar de ser sólo la esposa y convertirse en artista de talla universal.
De sus singularidades, rebeldías, dolores y añoranzas se llena la escena; ya sea rodando sobre la silla, en diálogos con la muerte y los fantasmas del pasado. Teje con el hilo de la vida que se trunca transcurre el espectáculo, y claro que Chavela Vargas la acompaña, porque no podría ser otra la música para mostrar el cóctel de emociones que ningún corsé ortopédico pudo jamás apresar.
El unipersonal es una propuesta disfrutable desde los conflictos que propone acompañados de tequila, óleos, melodías, colores y sueños; es una celebración de la vida, aunque se construya desde los dolores, pues nos dice directamente que los designios políticos y sociales no deben reducir al ser humano, estereotiparlo.
Es un acierto para el colectivo escénico lograr que, entre tanta información y lecturas, tras casi setenta años de su partida, el público conozca mejor a Frida Kahlo, entienda su contexto y comprenda que sus luchas tienen camino por recorrer en esta Cuba del siglo XXI.
Yuliet Montes logra que el acento azteca le acompañe, también encuentra gestos y cadencias, formas para hacer de Frida y de la muerte prácticamente un mismo ser.
Desde los momentos de la COVID-19 se gesta FK. Fantasía sobre Frida Kahlo, para su colectivo que ya venía ideando el proyecto, ocurrió primero la creación de la escenografía, luego la recopilación de una serie de elementos sincréticos y místicos para la construcción del personaje, otra manera de acercarse a esta mujer que buscó siempre superar todas las barreras.
Fotos: José Omar Arteaga Echevarría
