Por Yadiel de la Campa González
La compañía Teatro de la Luna, bajo la dirección de Raúl Martín, presenta en la Sala Adolfo Llauradó de la Casona de Línea la segunda temporada de la obra Mar nuestro, una pieza que completa la trilogía del dramaturgo Alberto Pedro.
Tres mujeres a la deriva en busca de sus sueños. Tres mujeres en una balsa a las que se les aparece la Virgen de la Caridad del Cobre en altamar, en una especie de analogía con la leyenda de los “tres juanes” que encontraron a la patrona de Cuba.
Así se nos presentan Fe (Yaité Ruiz), Esperanza (Minerva Romero) y Caridad (Osmara López) en medio de una aventura lúdica que tiene de todo, como el más puro ajiaco cubano: folclor, santería, religiosidad, racismo y feminismo.
Los tres personajes se confiesan ante una Oshún (Doreen Granados) más cotidiana, sabrosa como un ejercicio reflexivo en torno a temas sociales que permanecen vigentes, a pesar de las casi tres décadas que separan la puesta original de esta versión.
La sencillez de la escenografía de Mar Nuestro desafía a las actrices a mantener la atención del público, aparente obstáculo que queda atrás mediante la presencia escénica de un elenco magistral.
Teatro de la Luna ha llevado a escena una trilogía de obras de Alberto Pedro que datan de los noventa: Delirio habanero (1994), El banquete infinito (1999) y Mar Nuestro (1997).
El público todavía puede disfrutar de este trabajo performático en la Sala Llauradó hasta el 25 de febrero de este año.
En portada: Mar Nuestro, por Teatro de la Luna en la Sala Adolfo Llauradó. Tomado del perfil en Facebook de la Sala Adolfo Llauradó.
