Proyectos Intercambios Culturales: Catherine Zuaznabar quiere llevar la danza a todos los públicos

Catherine Zuaznabar comenta sobre futuros proyectos que traerán a la isla el intercambio de saberes y lenguajes de la danza académica.
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Por Marilyn Garbey Oquendo

Calificada como estrella mundial de la danza, Catherine Zuaznabar Mejías fue durante 18 años figura protagónica del Ballet Béjart de Lausana, y allí sentó cátedra al interpretar esa pieza clásica que es el Bolero, cuando Béjart se la confió en el 2004. En La Habana, aún se recuerda su magistral actuación en El lago de los cisnes con el Ballet Nacional de Cuba. Hoy desarrolla una fructífera carrera pedagógica y es madre de dos niños. Ahora comparte, en exclusiva, detalles del proyecto creativo con el que sueña por estos días y que muy pronto se hará realidad.

¿Por qué surge la necesidad de fundar el PIC, Proyectos Intercambios Culturales?

PIC no fue una necesidad, para explicarlo debo ir un poco atrás, al 2022. En ese año viajé a Cuba a bailar Sacre, una coreografía de Sandra Ramy. Hacía 25 años que no me presentaba allá, y estaba en un momento muy feliz de mi vida, porque en esa ocasión se hicieron realidad dos sueños. Después de bailar, me confirmaron que había sido invitada al Festival Internacional de Ballet de La Habana.

De regreso a Suiza, recuerdo que estaba en el aeropuerto de La Habana, y le dije a mi mamá: “Se me sale el corazón, no tengo ganas de irme de Cuba, pero también quiero irme a Suiza”. Era una sensación muy extraña. Tomé el avión junto a mis niños, y en agosto de 2022, en el aire, nace PIC, Proyectos Intercambios Culturales.

Por eso digo que no fue una necesidad, fue una intuición. No tenía nada claro en ese momento. Solo sabía tres cosas, que estaban involucrados dos países, Cuba y Suiza, Cuba porque es mi país de origen, Suiza porque es mi país de corazón; que tenía ganas de dar, y que quería propiciar intercambios entre estos dos países. Poco a poco, se fue clarificando lo que quería, le pongo el nombre Proyectos Intercambios Culturales y empecé a trazar estrategias para concretar el proyecto.

Lo primero que pasó por mi mente fue el deseo de aportar a la cultura cubana lo que se puede ver en el exterior de la isla. La cultura cubana es muy rica, pero podría incorporar otras cosas que hay en el mundo. El proyecto no se concretó en aquel momento, y lo dejé a un lado, pero en junio de 2023, sentada en el sofá de mi casa, volvió la misma intuición que tuve en el avión de regreso a Suiza, y me dije: Catherine, es ahora que debes echar a andar el sueño que tienes, lo debes hacer. A partir de ahí, comencé a visualizar los Proyectos Intercambios Culturales.

Siendo bailarina su principal gestora, imagino que será la danza el eje principal del PIC.

El eje principal del PIC es la danza, todos los lenguajes de la danza: clásica, contemporánea, neoclásica.

Podría pensarse que, después de 30 años de vida profesional como bailarina, ¿quieres cambiar de actividad?

No quiero cambiar de actividad, yo sigo bailando y soy profesora de ballet clásico y de Stretching postural®️. Es verdad que los años de experiencia que acumulo me han servido para conocer las necesidades de un bailarín. En estos momentos es el trabajo que hago en PIC, visualizo esas necesidades y las gestiono, me pongo tal vez en el lugar que yo estaba anteriormente y miro lo que necesitaba, lo que me sirvió a mí para emprender una carrera internacional, para enriquecer mi lenguaje, veo la riqueza que es trabajar con otros coreógrafos, con otros profesores, etcétera. Hay algo que nunca había dicho, y es que años atrás tuve otra intuición, me pasó por la cabeza que quería ser manager. Es una tarea que estoy descubriendo ahora, y es hermoso ese trabajo.

Catherine Zuaznabar en Sacre, coreografía de Sandra Ramy. Foto Sonia Almaguer.

Te formaste en el rigor de la escuela cubana de ballet. ¿Cuánto hay en PIC de la danza de Cuba?

De más está decir que suscribo el rigor de la escuela cubana de ballet, donde yo me formé. Para mí la ECB, con su metodología y su estructura organizada, es una base sólida, es la raíz del árbol, es lo que aprendes y nunca se te olvida.

Las manifestaciones de PIC las visualicé con esa estructura, basada en cuatro ejes, desde las metodologías de las danzas, hasta lo que yo llamo las Galas. La metodología es primordial para el aprendizaje del bailarín, a partir de ahí puede moverse a través de otros lenguajes. Luego vendrá la Masterclass, es decir, la clase magistral, junto a conferencias. Por qué las conferencias, porque es un encuentro muy humano, ahí puedes conocer de cerca la trayectoria de ese profesional, su experiencia en la danza. En la clase magistral podrán adquirir nuevos conocimientos, útiles para bailar. Habrá Talleres coreográficos, otra manera de darle a tu cuerpo saberes diferentes, los visualizo con coreógrafos de danza contemporánea. La Gala es la culminación de esos trueques, es el momento en que todo lo aprendido durante los intercambios llega a la escena, es ahí donde tú ves el trabajo que puede hacer un bailarín.

¿Qué aportará PIC a los bailarines?

Como bailarina y profesora puedo decir que la metodología de ballet es única; pero hay varias escuelas- la Vagánova, la francesa, la cubana- que la asumen con estilo propio. PIC aportará la riqueza de esa variedad de escuelas, los bailarines tienen ganas de conocer otras experiencias, tienen sed de aprender, y la podrán adquirir también en los Talleres coreográficos, que serán campos de juego para la imaginación, para la comprensión de otros estilos. Creo que eso será favorable para todo bailarín.

Hago un paréntesis para aclarar que PIC no es una plataforma solo para profesionales y estudiantes de danza, también es para aficionados porque quiero llegar al gran público, les propongo que participen en esta experiencia.

Eres una bailarina que se formó en Cuba y se desarrolló en Europa. ¿Influirán esos saberes acumulados en la apertura del intercambio?

Cuba me formó y Europa me desarrolló. Siempre he dicho que la Escuela Cubana de Ballet me dio la base, que Maurice Béjart me dio la experiencia artística.  A lo largo de mi carrera he estado al lado de profesores, bailarines, coreógrafos, y he tenido la oportunidad de que cada uno de ellos contribuyera a mi desarrollo artístico. Evidentemente, esos saberes van a influir en PIC porque todo eso está en mi ADN, esas experiencias artísticas son las que llevaré al proyecto.

Mi primera intención fue trabajar dentro de la isla, pero ahora PIC trabajará y colaborará con personalidades cubanas en Suiza, es el terreno que conozco y comparto mis raíces con los colaboradores. Así comenzaremos a andar.

¿Cómo trabajará PIC en Suiza? ¿Qué puede aportar a la danza de ese país?

Estudié las necesidades de la danza en Suiza y creo que le falta mucho por desarrollar. Después que dejé el Béjart Ballet de Lausana, empecé a trabajar en escuelas como el Atelier le Loft, ahora Danse Académie Vevey, en Nouvelle École de danse de Morges; hice stages en Studio Danse Fusion, en Atelier Danse à Genève, y me di cuenta de que faltaba una estructura sólida, esa base de formación, esa raíz de la que hablaba anteriormente. Me dije, «Cathy, aquí hay mucho que hacer», y ya estoy trabajando en ese sentido.

El objetivo de PIC es romper barreras, acercar a las personas a través de la danza. Quiero traer a grandes profesionales a Suiza, a metodólogos, profesores, coreógrafos, bailarines; para que interactúen con todas esas personas, amantes de la danza: profesionales, estudiantes, públicos. Porque se trata de eso, de llegar a los grandes públicos.

¿Cuándo tendrán lugar las primeras manifestaciones de PIC?

En el 2024 comenzarán las manifestaciones de PIC. En estos momentos buscamos sponsors, personas que nos ayuden, que colaboren con este proyecto tan bello de intercambios a través de la cultura, de la danza, que queremos crear en Suiza. Quiero resaltar el trabajo de mi equipo, Katharine Nguyen y Jesús Chang. Ella es alguien que conozco recientemente, pero su profesionalismo me cautivó, trabaja el grafismo, y fluimos muy bien. Jesús Chang está muy cerca de mí desde 1997, cuando me descubrió en escena. Es una anécdota muy bella que quiero contar aquí, nos reencontramos en 2019 y en junio de 2023 lo invito a que sea parte del proyecto y aceptó con los ojos cerrados. Es alguien a quien admiro muchísimo, y que me quiere muchísimo, hay mucha complicidad entre nosotros, quiero darle las gracias por su colaboración.

Estamos trabajando duro y somos muy felices por lo que hemos logrado desde septiembre, cuando se fundó PIC. Pronto anunciaremos buenas noticias, ahora les pido que sean pacientes.

Foto de portada cortesía de la entrevistada