Por Claudia Patricia Domínguez
El espectáculo que se insertó como parte del habitual espacio Iberocuento regaló a los holguineros una propuesta de alto valor estético, un momento para la reflexión y un canto a la esperanza en un historia premiada de conflictos familiares, soledades y tristezas.
Respetuosa del relato original del reconocido escritor uruguayo cuenta la historia de Martín Santomé, un hombre viudo, padre de tres hijos con los que no tiene la mejor relación debido a sus rutinas de trabajo y próximo a la jubilación le obsesiona la idea de escribir sus dias en un diario. La tregua para sus cavilaciones cargadas de desánimo y hasta de cierta amargura llegó con la joven Laura Avellaneda y su breve historia de amor.
La complicidad en escena y la naturalidad con la que ambos actores logran cambiar de rol desde un diseño escenográfico austero y efectivo logra impactar en el público desde los primeros instantes.
Al carisma del narrador protagonista se suma la versatilidad de su compañera que más allá de imprimirle ritmo a la obra como calzo para sus parlamentos brilla con luz propia, invitando al espectador a descubrir las esencias tras las personalidades de tres mujeres que marcaron la vida de Santomé: su hija Blanca, su difunta esposa Isabel y su joven amada Avellaneda.
“La Tregua fue una novela que impactó mi adolescencia”, significó a ¡AHORA! digital Nerit Olaya y añadió que aunque siempre anheló llevar esta obra al Teatro, no fue hasta que se acercó al arte de la narración oral que tuvo las herramientas necesarias para materializar la adaptación, proceso de varios años en el que también fue de gran utilidad su experiencia como editor.
Precisó que el trabajo con Palabras al Viento, compañía a la que conoció en 2017 y admiró de inmediato, y especificamente con Blanca Pérez ha sido maravilloso, pues “se trata de una actriz que además de talentosa y hermosa es muy sensible, se deja dirigir y sabe explorar. Es increíble el resultado que hemos logrado en tan solo dos semanas de montaje”.
Criterio compartido por Blanca Pérez, quien aseguró que no solo ha sido un placer inmenso compartir escenario con Nerit Olaya, amantísimo de la obra de Benedetti, sino haber tenido la posibilidad de descubrir tantos puntos en común entre el trabajo que hace Palabras al Viento en Cuba y el que hace Nerit en Perú, pues aun cuando cada narrador tiene su propio estilo, entre ellos hay más semejanzas que diferencias.
Característica que de acuerdo con Olaya guarda relación con lo enseñado por su maestro y teórico de las Artes Escénicas Ernesto Ráez, de quien aprendió que en el arte de la narración oral prima la enunciación, mientras que en el Teatro y el Cine lo hace la representación. Sin embargo, ambos proyectos suelen en sus obras lograr un híbrido entre la enunciación y la representación.
De ahí que a pesar de que la adaptación de La Tregua fuera hecha especificamente para narración oral escénica, desde su estreno la crítica del Perú siempre la aceptó como Teatro, comentó el artista y aseguró sentirse encantado por la acogida y el talento del que ha sido testigo existe en Holguín en todas las manifestaciones.
Si aun está usted entre los que no ha disfrutado de La Tregua no pierda la oportunidad de asistir el próximo 3 y 4 de noviembre a las tres de la tarde a la sala Alberto Dávalos del Complejo Cultural Teatro Eddy Suñol y disfrute de la genialidad de Benedetti en una historia contada por el peruano Nerit Olaya y la holguinera Blanca Pérez.
Fuente: Periódico ¡Ahora!