Por Jorge Alberto Piñero (JAPE)
Si no es un récord pudiera ser una buena marca la que ostenta mi amigo y excelente humorista Orlando Manrufo. Hablo de ese suigéneris espacio, genial para el humor, que todos conocemos como La esquina de Mariconchi; y que por muchos años mantiene su cuartel general en el citadino teatro América.
Fue una noche especial la del pasado dos de marzo en dicha sala teatral, donde el querido anfitrión, mejor dicho, anfitriona, porque fue el archiconocido personaje de Mariconchi quien recibió a muchos invitados en su fiesta de cumpleaños. Luis Silva (Pánfilo), Luis Carreres (Voltímetro), Wilber Gutiérrez (Chacón), Reuel Remedios (Lindoro Incapaz), entre otros reconocidos actores acompañaron a la divertida «diva» en su vigésimo cuarto aniversario.
La risa y el buen humor estuvieron asegurados gracias a la intensa y profesional labor de este actor que ha demostrado tener herramientas para todos los escenarios.
Orlando Manrufo se graduó como ingeniero en transporte marítimo y nunca se subió a un barco en acción laboral, su camino por la vida estaba signado por su histrionismo y sentido del humor natural.
Eterno amante del cine, se presentó con buenos resultados a una convocatoria con vistas a integrar el grupo de teatro para aficionados Olga Alonso, pues poco tiempo después debuta dentro del elenco de la obra Santa Camila de la Habana Vieja. Gusta del teatro dramático, pero sin dudas el humor es quien gana su preferencia y más allá de su personaje icónico ha desarrollado otros personajes que también transmiten la impronta de este hombre, que, de manera relajada, atrevida y lleno de jerga pueblerina nos transmite mensajes de profunda elaboración, siempre acorde con la realidad y el momento que le ha tocado vivir.
Ganador de varios premios Aquelarre y otras distinciones que destacan su valía profesional, transmito para Orlando, para Mariconchi y para sus muchos personajes, la más sincera felicitación de un pueblo que lo estima y que nunca dejará de acompañarlo en su acogedora esquina. Siempre es un placer trabajar con este actor cuya simpatía y buen humor se derrama más allá de las tablas o el set de filmación.
Fotos archivo personal del autor.
