El dramaturgo inglés Peter Brook en una imagen de 2012 (Claudio Onorati / EFE)
El dramaturgo inglés Peter Brook, pionero del teatro experimental británico y una de las figuras teatrales más importantes del pasado siglo por el carácter innovador de sus montajes, ha sido distinguido este miércoles en Oviedo con el Premio Princesa de Asturias de las Artes 2019.
El jurado ha ensalzado la figura de este dramaturgo de 94 años al definirlo como “maestro de generaciones” y “el mejor director teatral del siglo XX. El acta leída por el presidente del jurado, el director del Bellas Artes de Bilbao, Miguel Zugagaza, destaca que Brook es “uno de los grandes renovadores de las artes escénicas” con montajes de “alto compromiso estético y social”, como en su día fueron Marat-Sade y Mahabharata.
Según el jurado, Brook “abrió nuevos horizontes a la dramaturgia contemporánea, al contribuir de manera decisiva al intercambio de conocimientos entre culturas tan distintas como las de Europa, África y Asia”.
Peter Brook (Londres, 1925) fue director de la Royal Opera House y la Royal Shakespeare Company a mediados del siglo pasado, antes de trasladarse a París y fundar un grupo internacional de creación y teatro experimental, el Centro Internacional de Creaciones Teatrales (CICT), del que es director.
El galardón de las Artes, al que optaban 40 candidaturas de 17 nacionalidades, ha sido el primero en fallarse de los ocho premios que anualmente concede la Fundación Princesa de Asturias y que este año cumplen su XXXI edición.
En declaraciones a la agencia Efe tras recibir el galardón, Peter Brook ha asegurado estar muy agradecido por el premio y subrayó que seguirá trabajando “mientras pueda ser útil”. “Si no, la vida no tiene interés”, apuntó este artista ecléctico, director, escritor y actor, a quien la noticia le sorprendió en Suiza, donde ultima su último proyecto teatral, Why, un cara a cara entre dos intérpretes que se preguntan por qué han consagrado toda su energía al teatro.
La concesión de este XXXIX Princesa de Asturias de las Artes, añade, es “una alegría caída del cielo”: “Gracias, gracias, gracias. Gracias es una palabra bonita”, recalcó el londinense, que sostuvo que, “si puede”, acudirá en persona a la ceremonia de entrega en Oviedo.
Tomado de https://www.lavanguardia.com
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