La sección Contrapunteo del Noticiero Cultural de la Televisión Cubana, se acercó a la crítica de danza en Cuba. ¿Son suficientes los espacios ¿Cómo incide la creación coreográfica en los públicos? ¿Cómo se forman los críticos en Cuba?
Por Yuris Nórido / Fotos Buby
El movimiento de la danza en Cuba es referente indiscutible para la región. Pocos países cuentan con tantas compañías de todas las vertientes. Pocos pueden mostrar un sistema tan amplio para la formación de bailarines. Ante ese panorama, la crítica de la danza deviene elemento importante en el acompañamiento y la jerarquización de esas expresiones. Pero, ¿podemos hablar de un movimiento de críticos?
El crítico Ismael Albelo enfatiza: “No se puede hablar de un sistema de crítica de danza en Cuba. Hay especialidades como la música o el cine, que sí tienen un movimiento de críticos. Hay muy pocos críticos especializados en danza en nuestro país. A veces los que vivimos en La Habana nos circunscribimos a lo que pasa en La Habana. Si no llega de Santiago de Cuba a La Habana una obra muy buena nadie se entera”.
Para Mercedes Borges Bartutis, crítica e investigadora de la danza, no existen espacios fijos para la crítica de danza. “En la prensa escrita, por ejemplo, no se encuentran esos espacios, donde las personas puedan ir a buscar un comentario sobre danza. CMBF, Radio Musical Nacional, tiene espacios fijos, precisamente hago comentarios críticos dos veces a la semana en Agenda Cultural a las seis de la tarde.
“El principal problema que tiene la crítica de danza en Cuba es que no es continuada, las personas que escribimos sobre danza no lo hacemos de manera permanente”.
Esta puede parecer una pregunta retórica, pero representa un debate vigente: ¿para qué sirve la crítica de danza?
Rosario Cárdenas, Premio Nacional de Danza (2013), asevera que “la crítica representa puntos de vista. Sería mucho más satisfactorio que incluso hubiera contradicciones, siempre con una profesionalidad bien armada. La crítica moviliza, alerta, sensibiliza. Pero no se puede improvisar, porque entonces lo que se crea es una gran confusión”.
Mercedes Borges Bartutis explica que existen varios tipos de análisis de la danza. “Uno de ellos es el análisis cualitativo, que tiene que ver más con la “balletomanía”, donde se caracteriza de manera un tanto maniquea la presentación de una bailarina, siempre comparándola con un precedente. Hay otra crítica que se interesa más por las imágenes, los signos. Creo que el principal desafío de la crítica sería tratar de encontrar métodos de análisis que lleguen más, tanto al público especializado como a las grandes masas.
Puntualiza Ismael Albelo: “Hace falta la crítica, y que se valore esa crítica. El crítico tiene que ganarse su valor y prestigio”.
Hay zonas de la creación todavía desprotegidas, desafíos en la formación y en las competencias de los críticos, pero a eso nos referiremos en un próximo reportaje. La crítica de danza a contrapunteo.
En portada: La Consagración, Danza Contemporánea de Cuba
Fuente Noticiero Cultural / Televisión Cubana