El diseñador y fotógrafo camagüeyano Frank Álvarez acaba de fallecer víctima de un infarto.
De particular relevancia fue su vínculo con el Ballet Nacional de Cuba, con el cual tuvo una larga y fructífera colaboración en el campo de la fotografía y como diseñador escénico. Diseñó para obras como El reto y Sin embargo amanece (1984), El camino recto (1986), Paso por la vida (1987) y El estampido del trueno (1990), con coreografía de Hilda Riveros, Danzas de Mozart y El sueco (2006) de Eduardo Blanco y Preciosa y el aire y La bella durmiente (2009), ambas con coreografía de Alicia Alonso.
Nacido en Camagüey, realizó estudios en la Escuela Provincial de Arte de esa ciudad entre 1964 y 1966 y los continuó en la Escuela Nacional, en La Habana, de donde egresó en 1969. Posteriormente, entre 1969 y 1970, cursó estudios en la Escuela de Diseño Industrial, en la capital.
Complementó su formación artística, como diseñador y fotógrafo, con numerosos cursos impartidos por prestigiosos especialistas como la artista de la plástica cubana, Antonia Eiriz, instituciones como la Casa de las Américas y los Ministerios de Comercio Exterior e Interior de la República de Cuba.
Fue miembro fundador de la Asociación Cubana de Artesanos Artistas, su amplia labor creativa: trabajo de orfebrería, tapicería, diseño gráfico, fotografía, diseño textil y de modas, lo ha vinculado también al Ministerio de la Industria Ligera, el Fondo Cubano de Bienes Culturales, la Feria Cubartesanía, Cubamodas, Alamoda, Feria de La Habana y la Feria Internacional de Artesanía (FIART), así como a exposiciones de modas celebradas en Italia, España, Holanda, Nicaragua, Argentina y México.
Lleguen a familiares y amigos, nuestras más sentidas condolencias.
Tomado de la página en Facebook del Ballet Nacional de Cuba
