Matanzas tendrá un DanzanDos en la Academia que se desarrollará en paralelo con el Concurso que organiza Lilliam Padrón, del 6 al 9 de octubre próximo. Alvin Hernández Ricardo es su principal inspirador. La convocatoria está abierta para todas las escuelas de danza de nivel medio y puede ser consultada en el enlace que se encuentra al final de este texto
Por Mercedes Borges Bartutis
Lo conocí en una de las ediciones de Danza en Construcción que organizaba Noel Bonilla desde el Consejo Nacional de las Artes Escénicas en Manzanillo. A la cita, generalmente, llegaban creadores educados en la danza contemporánea, pero “el blanquito de folclor”, como algunos le decían, quiso probar suerte porque su meta era moverse diferente, no quedarse en los bailes yorubas, quería que su cuerpo fuera más allá, buscando otras posibilidades para “decir” con el movimiento.
Alvin Hernández Ricardo, camagüeyano de nacimiento, pero matancero por adopción, es un joven con muchas ganas de hacer por la danza cubana donde quiera que se encuentre. Hoy es el jefe del Departamento de Danza de la Escuela Vocacional de Arte Alfonso Pérez Isaac de Matanzas, lugar desde donde es responsable de la enseñanza elemental y media, lugar también desde donde se reinventa para seguir haciendo por la danza de este país.
Cuando lo llamé a su móvil, casi a finales de agosto, estaba de guardia en la Vocacional y me habló con vehemencia de la versión académica que está preparando para el DanzanDos, iniciativa que Liliam Padrón, líder del evento y directora de Danza Espiral, acogió con entusiasmo. Y ahora, Matanzas tendrá en paralelo con su Concurso de Coreografía e Interpretación DanzanDos, del 6 al 9 de octubre próximo, una competencia que da la posibilidad a los alumnos del nivel medio de danza en todo el país, presentar dúos y confrontar sus trabajos coreográficos.
Alvin cursó sus estudios de nivel elemental de danza en la Escuela Vocacional de Arte Luis Casas Romero de Camagüey, luego continúo con el nivel medio en la Escuela Profesional de Arte de Villa Clara. Su experiencia profesional comenzó en el Ballet Folclórico de Camagüey, bajo la dirección de Reynaldo Echemendía, fue coreógrafo del programa televisivo Bailando en Cuba y de la academia de la Lizt Alfonso Dance Cuba.
También ha tenido una vida muy activa entre los creadores cubanos, ha sido invitado en varias ediciones al Encuentro de Jóvenes Coreógrafos de Guantánamo y al taller Danza en Construcción. En 2010, Alvin fue reconocido con el Premio Ramiro Guerra, una distinción que otorga la Asociación Hermanos Saiz a los jóvenes que sobresalen por sus recorridos en la danza cubana.
Graduado en la Licenciatura Arte Danzario de la Universidad de las Artes (ISA), Alvin Hernández confiesa que siempre le ha apasionado la docencia y poder contribuir a la formación de bailarines; sin embargo, reconoce que no escogió ser jefe del Departamento de Danza de la Escuela Vocacional de Arte de Matanzas. “En la vida hay cosas que llegan por azar y aunque algunos no estuvieron de acuerdo con mi selección para este cargo, me siento comprometido totalmente y sé que puedo hacerlo”, manifestó el joven maestro.
A la pregunta de cuáles han sido los principales eventos e iniciativas que ha desarrollado desde que ocupa la jefatura de la especialidad de danza en la escuela expresó:
“No he podido realizar todo lo que me había planificado pues la pandemia me puso un stop obligatorio que aún se siente y se sentirá en los resultados de los estudiantes, pero esto me abrió la puerta a la tecnología y a crear grupos en las diferentes plataformas digitales donde colocamos clases de todas las asignaturas. Durante la pandemia hicimos dos concursos online, uno para los estudiantes donde participó también la escuela de Danza de Villa Clara y como invitada la compañía Leyenda Folk de Trinidad; el otro fue para la familia en casa que invitaba a liberar el cuerpo y la mente cuando más se necesitó. De vuelta en la escuela retomé mis metas y realizamos concursos y festivales donde todos los estudiantes participaron”.
“Mi imaginación cada día va más lejos y aunque quedan muchas piedras por pulir y otras por superar, creo que podemos aportar al desarrollo danzario de Matanzas, podemos lograr profesionales de cuerpo, alma y mente capaces de aportar a la danza del mañana”.
Y parte de esa imaginación se vio anoche, 11 de septiembre, con el teatro Sauto desbordado, la Escuela Vocacional de Arte Alfonso Pérez Isaac de Matanzas realizó su Festival de Folklore Violín para Ochún, bajo la dirección de Alvin Hernández Ricardo, para rendir tributo a la Caridad del Cobre, patrona de Cuba, y sumar a la tradición que desde 1941 tiene lugar en toda la isla.
Alvin y su equipo se encuentran en plena faena para desarrollar el DanzanDos en la Academia. Es una puerta que se abrirá del 6 al 9 de octubre, en paralelo con el Concurso principal. Lilliam Padrón le ha dado un voto de confianza, lo conoce y sabe que se exige, sabe que pondrá todas sus fuerzas en que la competencia de dúos para estudiantes tenga un buen nivel. Para Alvin y sus empeños deseamos lo mejor, la danza cubana tiene en él un aliado eterno.
Bases del concurso DanzanDos en la Academia:
Convocatoria DanzanDos en la Academia 2022