Un verano lleno de color
Por Yoamaris Neptuno Domínguez
En el año en el que Teatro Tuyo celebra su aniversario 25 no han cesado las actividades. Momento importante la realización de la Octava Edición del Festival Internacional de Payasos. Desde enero ha sido mucho lo efectuado junto a buenos amigos que también trabajan para las infancias. Las celebraciones comenzaron en La Habana, se destaca su presentación en zonas de las provincias Granma, Pinar del Río, Matanzas y en conversación con Ernesto Parra, líder de la agrupación nos comenta que se reservan otras sorpresas y estrenos para lo que queda de año.
Concluye la etapa veraniega y Teatro Tuyo ha tenido una actividad intensa. Nos sentimos felices de nuestra participación en disímiles eventos como El Festival del Humor Aquelarre y la Bienal del Humor Político. Fuimos protagonistas de nuevos espacios en el parque La Maestranza, en la sede de la UNEAC y en el Hotel Comodoro. En la Televisión estuvimos presente en la Revista Buenos Días con Mi roja nariz y en los ya habituales Corazón Feliz y TV Alegría. Nos estrenamos en el cine al participar en la película Cinco historias de amor y un bolerón, bajo la dirección de Arturo Santana. Fuimos invitados al concierto de despedida del verano Somos niños protagonizado por el dúo conformado por Gaby y Sofi, en el Cine Yara.
¿Y el intercambio que tuvo Papote en La Colmenita?
Ah, esa fue una experiencia hermosa, edificante y lúdica con seres de buen corazón. El intercambio fue con niños y niñas de entre 5 y 8 años mediante 3 especiales talleres: Aprender jugando, Comedia física y El infinito universo del clown. Esa semana la terminé tan radiante y feliz “como un baño de luz”.
Pero sin lugar a dudas, el plato fuerte del verano fue el Taller Escuela de Narices rojas…
Seguro, no tiene discusión. La matrícula prevista era solo 30 infantes y terminaron siendo 100 los que tuvimos que admitir, y ya hubo que parar.
Digamos que esas narices rojas son la nueva generación del clown…
Bueno, la finalidad no es buscar talentos, la idea es propiciar un acercamiento al arte del clown, del payaso junto a sus familias. Al final solo es un pretexto para que la familia encuentre un espacio para aprender, para jugar, un espacio de formación de públicos. Si en lo adelante, si en el futuro alguno de estos niños quieren convertirse en actrices y actores clown pues bueno, nuestra Escuela Nacional de Teatro le ofrece el perfil de formación a partir de los 18 años de edad; así que estaremos encantados de recibirlos.
Con satisfacción podemos asegurar que nos nacieron un centenar de hijos en el arte y lo pudimos constatar en “La casa de Papote en Concierto” en una jornada inolvidable en la mítica Casa de Las Américas, y en el Anfiteatro del Centro Histórico de La Habana Vieja con la querida cantautora Enid Rosales y su grupo donde fuimos partícipes del espectáculo Música para jugar, como cierre de los talleres de Verano liderados por Daya Aceituno y su banda.
Y aunque hablamos de cierre la buena noticia es que el taller de Narices no termina. En septiembre tendremos dos encuentros a la semana, los participantes actuales podrán continuar y próximamente se lanzará la convocatoria para nuevas captaciones a los que se quieran sumar.
Con tanta tecnología, tantas otras actividades que puedan resultar más atractivas, ¿qué impone tener ahora mismo una nariz roja?
El teatro siempre va a ganar, la magia de ponernos algo como una nariz y que podamos sentir que es un juego siempre le va a ganar a toda la tecnología. El teatro estaba ahí cuando surgió el cine, luego este se hizo sonoro, llegó internet, los videojuegos y el teatro siempre ha estado porque es una necesidad de los seres humanos de inventar con nuestras propias manos, de transformar rostros, la voz, de imaginar, de crear historias y eso a través de la pantalla puede hacerse; pero no es igual a cuando lo hacemos humanamente, de tú a tú, junto a nuestros públicos.
¿Qué es lo próximo de Teatro Tuyo?
Ya estamos listos para el inicio del curso de nuestra especialidad de Clown de la Escuela Nacional de Teatro. Cumpliendo un año de nuestra llegada a La Habana ya contamos 117 funciones… seguimos juntos haciendo el camino.
Fotos cortesía de la autora