Miguel Ángel Pineda: almas y puentes por la danza
Se desarrolla en la provincia de Artemisa danzapuentes’23, un encuentro que une voluntades…
Por Reinier del Pino Cejas
Artemisa, Cuba.- El maestro Miguel Ángel Pineda Martínez, director de la Compañía de Danzas y Bailes Tradicionales Alma Mexicana observa a los muchachos en el escenario. Los ve mover con gracia sus trajes para el público cubano a propósito de su participación en la tercera edición del evento internacional danzapuentes’23. El profesor sonríe. Más allá del cuidado en la ejecutoria y la precisión del gesto, sabe que esos puentes que se tejen en Caimito, Artemisa fertilizan el corazón de algo que ama profundamente: la danza.
¿Qué significa para usted y su compañía participar en este evento y estar en Cuba?
Nos costó mucho trabajo venir a La Habana, pero aquí estamos. Con mucho esfuerzo, cariño y amor por estar con ustedes. Esto nos abre un camino porque nuestro propósito es apoyarnos en nuestros proyectos. Estamos iniciando esta relación que nos va a durar por muchos años. Tengan la seguridad de que todo lo que hagamos será por amor a la danza y por cariño al pueblo de Cuba.
¿Quiénes integran Alma Mexicana?
Somos un grupo artístico representativo regional centro del Instituto Mexicano del Seguro Social, con 34 años en el mercado artístico cultural de México. La compañía la integran alrededor de 70 bailarines jóvenes y nuestro trabajo consiste en mantener vivas las tradiciones de nuestro país. Somos un grupo que ama la danza y defiende las raíces mexicanas.
¿Cuánto demanda sostener un proyecto como Alma Mexicana en el contexto actual pospandémico de América Latina?
Antes de la pandemia de covid 19 éramos 120 integrantes. Es mucho trabajo, pero creo que las inversiones que hacemos en tiempo, y una gran cantidad de veces en dinero, valen la pena. La danza es algo que amamos. Lo que la danza nos hace vivir es lo que nos llevaremos de este mundo. Eso he tratado de inculcárselo a mis estudiantes.
Alma Mexicana en el desfile inaugural de danzapuentes’23
¿Mantener la tradición danzaria es una gran responsabilidad? ¿Cómo la asumen?
Creo que todas las agrupaciones creamos propuestas de trabajo. No hablo de modificar las tradiciones sino de una propuesta propia donde tratamos de mantener la esencia y el origen de los bailes. Esto es susceptible de críticas porque hay quien nos dice: “Te estás saliendo de lo tradicional”. Creo que eso también es válido. En nuestra compañía respetamos la base tradicional, pero hacemos adaptaciones en algunos bailes.
Hay elementos que no se pueden cambiar como las danzas. La Danza del Venao no es modificable porque se trata de una danza muy tradicional en el norte de Sonora en la que el bailarín va a la esencia del animal y vive la persecución en un escenario. Pero si lo analizamos, ya el bailarín lo hace en un escenario y no en las locaciones donde debería ejecutarse la propuesta. O sea, que esa parte de la tradición no se sostiene. No obstante, la danza está ahí y el danzante se prepara para encarnar ese personaje. Ese es el mérito.
Creo que hay una influencia comercial en la danza en México, como en todos los países, y disfruto proponer con Alma Mexicana otras miradas a las distintas regiones de mi país con propuestas funcionales porque México es más que el jarabe tapatío o el son de la negra. Defendemos la idea de que ir más allá de eso puede dejar una mayor información de quienes somos.
¿Alguna propuesta especial para Danzapuentes 2023?
Traemos bailes de Sotavento en el Estado de Veracruz, del estado de Chihuahua, danzas de los concheros del Estado de México… Una diversidad de bailes y de regiones mexicanas. Hay mucho material y creo que va a valer la pena. Estamos ansiosos por mostrarles lo que hacemos y conocer lo que se hace en Cuba también.
El maestro Pineda es un convencido del poder de la danza. Observa a sus bailarines y mira al público feliz. Entiende que para el lenguaje de la danza no existen límites geográficos ni temporales. La tradición se hace contemporánea porque la belleza es una categoría universal y trasciende todas las fronteras conocidas.
Alma Mexicana tiende un puente en defensa de lo que los identifica. Cuba también lo hace y acompaña ese puente con un aplauso desde el parque de Caimito, en Artemisa. Con un aplauso que sale también desde el alma de la nación agradecida por el buen arte.
En portada: Alma Mexicana durante su primera presentación en danzapuentes’23