Memoria escénica en Las Tunas: un resguardo necesario

Por Yelaine Martínez Herrera
Para nadie es un secreto que con el tiempo programas, elencos, detalles de la escenografía y otros elementos necesarios que signan las puestas en escena se pierden, se olvidan y, en el mejor de los casos, terminan guardados en algún álbum o en el recuerdo de protagonistas y espectadores.
Por ello, que a la provincia le nazca un sitio destinado a salvaguardar su memoria en ese sentido reviste una gran significación. Según informa el especialista de las artes escénicas Alberto Carlos Estrada Segura, principal responsable de la encomienda, esto responde a una intención nacional que aboga por la existencia de espacios con ese fin en los diferentes territorios del país.
Así, en los altos de la sala Raúl Gómez García, sede del teatro guiñol Los Zahoríes, se acondiciona el sitio de la memoria escénica en la provincia, que Estrada Segura ha tenido a bien llamar Alfonso Silvestre Sierra, por los aportes indiscutibles de este creador.
“Ya varias provincias tienen un centro de este tipo. Matanzas, por ejemplo, posee la Casa de la Memoria Escénica. Las Tunas adolecía de esto, pero es algo muy importante. De hecho, es prioridad del Ministerio de Cultura que los territorios conserven su historia, su patrimonio, su cultura”, alega.
Aunque el local aún es pequeño para tal desafío, desde aquí apoyamos la idea y exhortamos a autoridades, directivos y todo aquel que posea algún texto, imagen o dato relacionado con ello a que contribuya. Allí pudimos constatar la existencia de ejemplares de la revista Tablas, libros sobre teatro europeo y cubano, pendones, fotografías y publicaciones variadas, pero todavía es un proyecto incipiente que debemos apoyar. En el 2026 Alfonso Silvestre cumpliría 100 años de vida; sería un buen momento para mostrar un local digno de él y de todos nuestros artistas escénicos.
Tomado del periódico 26