Los mundos imaginarios de Teatro de la Utopía
FK. Fantasía de Frida (70 minutos), que recibió Premio Rubén Vigón de Diseño de Vestuario (2022), continúa sus funciones este sábado 18 y el domingo 19, en la Sala Adolfo LLauradó, siempre a las 5:00 pm
Por Maya Quiroga
Teatro de la Utopía, fundado en el 2005, en Pinar del Río, por Reinaldo León Coro y Yuliet Montes, se presenta en la XX edición del Festival de Teatro de La Habana con la obra FK. Fantasía de Frida Kahlo.
En la última sesión del evento teórico del Festival el director y dramaturgo hizo un recorrido por momentos significativos en la historia de la agrupación.
Puedo decir que alrededor de 56 años de mi vida viví en La Habana y siempre que vengo aquí siento sensaciones muy especiales porque me encuentro con compañeros, con amigos muy cercanos, en una ciudad donde, prácticamente crecí, me hice hombre, tuve familia. Realmente, uno arrastra mundos. Por eso para hablar de FK. Fantasía de Frida Kahlo habría que hablar de mundos donde uno ha estado.
León Coro reveló que en las últimas tres décadas Yuliet y él descubrieron nuevas dimensiones del teatro. Se refirió al encuentro con un campesino achí, grupo étnico de origen maya, quien le enseñó cómo las danzas sagradas tienen una función social que une a ese pueblo, para resolver problemas, y le dio una lección de respeto a la Pachamama.
“Ese hecho me cambió y me dio una vuelta tremenda en el mundo de toda la gente que pretende hacer un teatro visceral. Y eso tiene siempre un precio. Para nosotros fue quizás un autoexilio poético”, confesó.
Y agregó: “Es un exilio que a veces estando dentro de tu comunidad necesitas tenerlo para meditar y para poder entrar en un proceso de creación que realmente te lleve a cuestiones de anclaje, no solamente en el plano cultural, sino, y sobre todo, a hacerte la pregunta: lo que estoy haciendo, para qué le sirve a la gente que va a verlo”.
Aseguró que la visión del imaginario popular sobre la muerte los condujo a otra visión sobre el manejo del actor, desde sus propias profundidades y los hizo preguntarse cuál era el cordón umbilical y el objetivo de sus puestas en escena.
“No puedo hablar de Fantasía de Frida Kahlo sino menciono este estado de cambio de giro donde, por una parte, estaba el hecho de descubrir también la muerte real: la muerte que uno encontraba en las calles, en aquellas zonas más marginales que tienen nuestros pueblos. Hay una conexión, un hilo, que es más profundo, para llegar a FK”, expresó.
A su regreso a Cuba estrenaron en el teatro Milanés, de Pinar del Río, la obra Vagos rumores, de Abelardo Estorino que les dio la oportunidad de destapar otro mundo, desde los muertos cubanos. Después montaron otras piezas del dramaturgo matancero.
Recordó que, en 2018, Teatro de la Utopía estrenó Josefina la cantora, a partir de un cuento corto escrito por Frank Kafka, donde el tema central es la guerra y se realiza una meritoria labor de máscaras faciales.
Citó un parlamento de Yuliet: “Cuidado, el fascismo vuelve. Cuidado, el fascismo está ahí. Cuidado, el mundo de los migrantes y de los muertos, por migrar, está ahí, al alcance de un disparo de pistola”.
“Entonces –acotó– FK nace de ese sentido global que nos trae la pregunta: ¿cuál es la misión del intelectual, del artista, en relación con su compromiso social? Esa es la gran pregunta de FK: ¿cuál es nuestra misión sobre la tierra?”
En su opinión la pandemia de la Covid-19 se convirtió en una oportunidad para no parar y tener conciencia de que había que seguir andando.
“A veces nos escapábamos para la sala de teatro, Yuliet y yo, a trabajar solos, por supuesto con el permiso del director. No paramos, seguimos trabajado y la casa se convirtió en un taller después de la labor investigativa alrededor de la figura de Frida Kahlo”.
Según la sinopsis de la obra es La Muerte quien narra pasajes de la vida de la pintora mexicana y recrea una fantasía donde la artista exige que abran la puerta del baño de la Casa Azul, cerrada por mandato de su compañero Diego Rivera.
“Tomamos a Frida para decir que los muertos no están contentos con la manera en que están viviendo los vivos. De manera que hay muchos mundos. Me siento complacido porque, en mi ya larga vida, he vivido algunos mundos y es tan bueno vivir diferentes mundos y en el que está al final de la vida”, concluyó.