La zarzuela El Cafetal vuelve a la escena cubana
Regresa a la escena habanera una obra que constituye parte del patrimonio sonoro cubano, la cual no se representaba desde el siglo pasado
La zarzuela cubana El Cafetal vuelve a la escena nacional y tendrá funciones en la sala Avellaneda del Teatro Nacional, el sábado 30 de noviembre, a las 7:00 pm, y el domingo 1ro de diciembre, a las 5:00 pm. Las presentaciones están dedicadas al aniversario 40 de la productora Radio Arte y al 505 de La Habana.
Auspiciado por CMBF, Radio Musical Nacional, el Consejo Nacional de las Artes Escénicas, el Ministerio de Cultura de Cuba y el Teatro Lírico Rodrigo Prats de Holguín, la ambiciosa producción contará con el Coro y la Orquesta Sinfónica de la Radio y la Televisión Cubanas, liderados por Liagne Reyna y el maestro Miguel Patterson, quienes asumirán la ejecución musical, junto a solistas del movimiento lírico de nuestro país, donde compartirán la escena cantantes de La Habana y de la ciudad de Holguín.
Por otro lado, actores invitados darán vida a las escenas habladas que propone el libreto original, en el que convergen momentos dramáticos y de marcado humor criollo, destacando también la presencia danzaria, con coreografías del Premio Nacional de dicha especialidad Johannes García, junto a su Compañía de Danzas Tradicionales de Cuba JJ.
La puesta en escena tendrá la dirección artística de Helson Hernández, con la asesoría musical de Ubail Zamora, asistencia de dirección de Alejandro Pichs, diseños de luces de Ronald Hernández, vestuario de Rafael Oramas y jefatura de escena de Carlos Azcuy.
La zarzuela El Cafetal, con libreto original de Gustavo Sánchez Galarraga y música de Ernesto Lecuona, nuestro compositor más universal, fue estrenada en el entonces Teatro Regina, el 1ro de marzo de 1929, con posterior reposición en el Martí en 1932.
Justo cuando El Cafetal cumple sus 95 años, en 2024, se rescata la importante partitura. La acción transcurre en 1880, en el batey de un cafetal próximo a La Habana, donde se narra la realidad de una época marcada por la desigualdad y la esclavitud. Es apreciable la diversidad de ritmos musicales que la obra define de nuestra identidad cultural, panorama sonoro que, de manera magistral, supo plasmarlos en esta obra su creador Ernesto Lecuona.