Aniversario 135 del Teatro La Caridad de Santa Clara

Este martes, 8 de septiembre, el Teatro de La Caridad de Santa Clara cumple 135 años de fundado por Marta Abreu, la mujer que hizo mucho por esa ciudad y su gente

Integrante de la trilogía de teatros cubanos nacidos en el siglo XIX, La Caridad constituye una de las edificaciones con mayor expresividad dentro del conjunto urbano que rodea al parque Leoncio Vidal Caro de la capital villaclareña.

Abrió sus puertas al público, un 8 de septiembre de 1885 por iniciativa de la Ilustre Marta de los Ángeles Abreu de Estévez, en el espacio que ocupó la Ermita de la Candelaria. Su fin, socorrer a partir de sus ingresos, las necesidades de los pobres.

Integrante de la excelsa trilogía de teatros cubanos nacidos en el siglo XIX -al que se suman el Tomás Terry Adans de Cienfuegos y el Sauto de Matanzas-, por sus valores patrimoniales, ambientales y arquitectónicos, constituye una de las edificaciones con mayor expresividad dentro del conjunto urbano que rodea al parque Leoncio Vidal Caro de la capital villaclareña.

La decoración correspondió al pintor filipino Camilo Salaya, graduado de la academia madrileña San Fernando, quien tuvo a su cargo la decoración del cielo raso y los laterales junto a otros pintores populares de la ciudad, mientras la imagen de la Ermita de la Candelaria, quedó estampada sobre el telón de entreactos de la naciente obra arquitectónica.

Cuentan las publicaciones de la época, que la institución fue recibida con beneplácito por los habitantes de la ciudad, quienes agasajaron a la benefactora con una medalla conmemorativa a nombre del pueblo en la propia sede, mientras  se presentó, por  un grupo de aficionados la obra dramática La Caridad, y un grupo de solistas locales brindaron su talento artístico.

A 135 años del suceso, y luego de varios procesos de restauraciones, La Caridad continúa como uno de los símbolos santaclareños, y como el punto neurálgico de la vida cultural de una ciudad que atesora, precisamente en sus predios, esa mezcla de tradición y modernidad, que a fin de cuentas, integran nuestra cultura.

Fuente: TeleCubanacán