«Mundo Interpretado», Estreno De Acosta Danza

Las funciones continúan este fin de semana (31 de enero, 1 y 2 de febrero), en el Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso

Por Ismael S. Albelo / Fotos Buby

“Para mí el cubano es casi como el brasileño”, afirmaba el coreógrafo Juliano Nunes en una entrevista aparecida en el programa de mano de la reciente temporada de Acosta Danza titulada Cuerpos. Y tomando en cuenta que Nunes es, precisamente, natural de Río de Janeiro, esta afirmación, apenas llegado desde Europa para crear una pieza con la compañía dirigida por Carlos Acosta, pudiera parecer una opinión algo precipitada, basada en las tradicionales similitudes entre ambos pueblos, de raíces semejantes, y manifiestas por no pocos en el mundo.

Lo cierto es que, durante el trabajo con la compañía, en especial con sus bailarines, Nunes comprobó que esta apreciación era muy certera, lo que pudo haberle facilitado la creación de Mundo interpretado, obra apoyada en la música original de Pepe Gavilondo y con diseños de Glenda León.

Sin embargo, Mundo interpretado no recurre a los estereotipos que han marcado a nuestros pueblos, el samba o la rumba, las identidades africanas ancestrales, sino que va más allá en la “interpretación” y coincidencias de ambos mundos: si bien Gavilondo con su música ha introducido gérmenes “tropicales”, sobre todo en el primer movimiento              –interpretado, dicho sea de paso, como pieza de relojería por los bailarines–, durante el resto de la pieza desborda toda su capacidad musical en acentos contemporáneos ajenos al folklorismo para apoyar la filosofía kinética de Nunes, también alejada de lo tipicista pero muy próxima al interior del cubano… y del brasileño.

En realidad, el joven coreógrafo más que “interpretar” el mundo lo “re-interpreta”, o por mejor decir, lo descubre con una mirada introspectiva de lo que él observa en el cubano, y que con seguridad le recuerda al brasileño. Cada sección de la obra consigue un panorama, una visión diferente y complementaria de esos pueblos, de su gente, pero con la mirada puesta en las esencias y no en las fachadas.

Inesperadamente Mundo interpretado culmina con un dúo anticlimático, a la usanza de los finales posmodernos, con toda la fuerza y –a la vez– el lirismo del cubano, y del brasileño, con una excelente interpretación de Gabriela Lugo y Alejandro Silva en la cuerda de la danza académica, zapatillas de puntas incluidas.

Al Mundo interpretado de Nunes lo apoya el diseño cinético de Glenda León, otro “mundo” lleno de flores de loto que descienden y se elevan en dependencia de la atmósfera que pretende el coreógrafo, apoyado por el diseño de luces de Pedro Benítez.

Si no pudo “interpretar el mundo” de Nunes la semana pasada, tiene aún la posibilidad de interpretarlo este fin de semana (31 de enero, 1 y 2 de febrero), en el Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso, en la continuación de la temporada Cuerpos de Acosta Danza.