De ballet en otras mediaciones

A propósito del ciclo Danza en la pantalla

Por Andrés D. Abreu

Bajo el título de Ciclo de Danza en la pantalla, la programación del 27 Festival Internacional de Ballet de La Habana Alicia Alonso incluyó un apartado dedicado a filmes dónde la danza protagoniza las estructuras narrativas ya fuese desde historias documentales o de ficción, abriendo un otro canal de interrelaciones sensibles y posibilidades perceptivas del arte danzario.

La mayor parte del programa estuvo aportado por el servicio de cooperación cultural de la Embajada de Francia en Cuba y esto permitió disfrutar en la gran sala cinematográfica La Rampa de obras como la comedia dramática Polina, dirigida por el coreógrafo  Angelin Preljocaj y la realizadora Valérie Müller, donde se cuenta de manera muy convencional la historia de una joven bailarina rusa que consigue su entrada a la prestigiosa compañía de ballet del Teatro Bolshoi y luego decide abandonarla para seguir tras el amor de un bailarín francés que la lleva a  Aix-en-Provence y al encuentro con otras formas de asumir la danza. Una pieza que parte de una historieta o comic original de Bastien Vivés, y que en la versión cinematográfica relaciona con elementos biográficos del propio coreógrafo y codirector Angelin Preljocaj, hijo de albaneses que emigraron a Francia, estudia danza clásica pero prefiere la contemporánea y en un viaje New York conoce la técnica de Merce Cunningham. Preljocaj tiene obras en el repertorio de la Ópera de París y es Premio Benois de la danza pero su propia compañía está anclada en Aix-en-Provence.

Prelcojac y su compañía fueron invitados a la edición 23 del Festival de Ballet de la Habana y parte de su repertorio pasó por la sala Covarrubias del Teatro Nacional en ese año 2012. El programa de la actual edición del Festival incluyó el linke  promocional de la película en la plataforma YouTube https://www.youtube.com/watch?v=8syCaVCApo0, dotando todo este engranaje de referencias, experiencias, intertextos y multimedios de un cierto aire transmedial al suceso danzario mismo.

Otra interesante propuesta del programa francés incluido en el 27 Festival de Ballet fue el documental Las Indias Galantes, (https://www.youtube.com/watch?v=m7EgfrgLroc) realizado por Philippe Béziat a partir de la experiencia única que significó el registro cinematográfico de uno de los hechos de mayor relevancia en la cultura contemporánea europea. En el año 2019 treinta bailarines de los barrios parisinos, pertenecientes a las tribus urbanas de hip-hop, krump, break, voguing, son convocados a tomar de manera simbólica con su arte la Ópera de la Bastilla desde la experiencia creativa de la versión operática del director Clément Cogitore y la coreógrafa Bintou Dembélé de la obra maestra barroca de Jean-Philippe Rameau, Las Indias galantes.

La fuerza de este acto político del arte en reafirmación del rompimiento de las barreras entre las llamadas alta y baja cultura y en disenso al elitismo conservador  tuvo una versión primera de 6 minutos,  un adelanto en extracto audiovisual promocional de este suceso postmoderno que fue presentado en el mismo año 2019 durante XIII Bienal de la Habana como parte de la intervención multimedial La posible reconstrucción de nuestros mundos, acción curatorial que organizara el proyecto TECNOLOGÍASQUEDANZAN en el Gran Teatro de La Habana.  Gracias a la cooperación del proyecto francés imagespassages llegó a Cuba este primer acercamiento fílmico a Las Indias galantes de Cogitore, material que circuló además por la gran pantalla de Fábrica de Arte Cubano durante el XIV Festival Internacional de Videodanza  DVDanza Habana Movimiento y Ciudad.

La muestra francesa del Ciclo Danza en la pantalla que se presentó en el Cine La Rampa también incluyó  el filme de ficción del 2018 Les Chatouilles, de Andréa Bescond y Eric Métayer, https://www.youtube.com/watch?v=Egs3tYnAEHg, un drama del 2018, y el documental del 2016  La Ópera de París, de Stéphane Bron, https://www.youtube.com/watch?v=9cK1He55fNQ.

Para cerrar la programación del Ciclo de Danza en la pantalla, el 27 Festival Internacional de Ballet Alicia Alonso, con la colaboración de la Embajada de España en Cuba y la Casa de Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, tuvo muy a bien propiciar la premier en Latinoamérica del documental Hasta el alba, una excelente obra de cine danza dirigida por Horacio Alcalá sobre los procesos creativos de la Compañía Nacional de Danza, de España, bajo la actual dirección artística de Joaquín de Luz.

Aunque el documental, recién estrenado mundialmente en la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci), parte y se centra en el proceso de montaje y estreno en La Zarzuela de Madrid de la versión del ballet romántico Giselle que Joaquín de Luz creara para su actual Compañía, su alcance a nivel narrativo y visual se expande sobre este importante hecho y poetiza de cierta manera la existencia de esta agrupación danzaría española que surgió como Ballet Nacional Clásico y que ha tenido entre sus directores anteriores a figuras  como Víctor Ullate, Maya Plizetskaya y Nacho Duato, entre otros

Al decir del realizador Horacio Alcalá, y lo confirmó también Joaquín de Luz, el encuentro de los lenguajes cine y danza no fue fácil para ninguno de los dos bandos. Por una parte, Horacio se propuso penetrar el contexto de esta institución de la danza académica española desde sus interioridades posibles y también desde otros contextos a fines al relato de la obra, la compañía y sus protagonistas actuales. Considero una importante idea el hecho de hilvanar el libreto original de Giselle y su lectura performática desde la dicción de su escritura literaria hasta la ejecución corporizada de sus imágenes por parte de los danzantes en el escenario no convencional de la Biblioteca Nacional, en los salones de ensayo y en el mítico escenario teatral, para así hipertextualizar el acceso documental y abrir las miradas al fenómeno convocado.

Un montaje fluido de idas y vueltas narrativas, de paralelismos y confrontaciones aludidas, tomas frontales y desde trasfondos, acercamientos humanísimos a ese cuerpo ultraentrenado para ejecutar el baile académico y sobre sí portar esos espíritus cambiantes que son los personajes, hacen que fluya una seducción dialógica durante la hora y cuarto que dura esta creación audiovisual que se constituye como otra excelente plataforma para la transmediación de la Giselle de Joaquín de Luz y su Compañía Nacional de Danza, https://cndanza.mcu.es/proyecto-educativo/infancia-jovenes-adultos-y-comunidad-socio-educativa/vivamos-la-historia-de-giselle/.

Pd. La Compañía Nacional de Danza de España se presentará en la Sala Avellaneda del Teatro Nacional los días 11, 12 y 13 de noviembre como parte de la Programación del 27 Festival Internacional de Ballet de La Habana Alicia Alonso